S I N     D E F E C T O

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Reina Valera 1960

Éxodo 12: 4-5 “El animal será sin defecto, macho de un año; 
lo tomaréis de las ovejas o de las cabras. Y lo guardaréis hasta
el día catorce de este mes, y lo inmolará toda la congregación
del pueblo de Israel entre dos tardes”.                                                                                      

Levítico 21:17-23  “Habla a Aarón y dile: Ninguno de tus
descendientes por sus generaciones, que tenga algún
defecto, se acercará para ofrecerel pan de su Dios.  Porque
ningún varón en el cual haya defecto se acercará; varón ciego,
o cojo, o mutilado, o sobrado, o varón que tenga quebradura
de pie o rotura de mano, o jorobado, o enano, o

que tenga nube en el ojo, o que tenga sarna, o empeine, o
testículo magullado. Ningún varón de la descendencia del
sacerdote Aarón, en el cual haya defecto, se acercará para
ofrecer las ofrendas encendidas para Jehová. Hay defecto en él;
no se acercará a ofrecer el pan de su Dios. Del pan de su Dios,
de lo muy santo y de las cosas santificadas, podrá comer.
Pero no se acercará tras el velo, ni se acercará al altar,
por cuanto hay defecto en él; para que no profane
mi santuario, porque yo Jehová soy el que los santifico.

La ofrenda y el sacerdote serán SIN DEFECTO.

 Defecto es la carencia o imperfección de las cualidades propias de algo:

imperfección o tacha moral: ausencia de; a falta de: a falta de algo o
alguien, en su lugar. (No perfecto). Inexacto por debajo del límite que
debería alcanzar.

Comenzaremos por aclarar que en el Antiguo Testamento se

establecieron mandatos para el pueblo de Israel y que en el N.T.
deben entenderse en lo espiritual. ¿Por qué? Porque ya no estamos
bajo la Ley; sino bajo La Gracia.                                         
Por ejemplo: Cuando Dios llevó a su pueblo al desierto, ordenó a
Moisés la construcción del Tabernáculo. Dios dictó las medidas, los
materiales, la forma, el color, es decir, que Moisés obedeció a Dios el
diseño divino; que los acompañó en la peregrinación durante cuarenta
años a través del desierto. Pero en Apocalipsis 21:3; dice: “Y oí una gran
voz del cielo que decía: He aquí el tabernáculo de Dios con los hombres,
y él morará con ellos; y ellos serán su pueblo, y Dios mismo estará con
ellos como su Dios”.

Porque con la venida de Cristo, su muerte y resurrección, el tabernáculo

físico que levantaba el pueblo cuando iniciaba una jornada caminando,
y volvía a construir en donde la nube se paraba; se cumplió ya en Cristo
y hoy no levantamos la tienda; porque nuestro corazón es el tabernáculo
de Dios (su templo y morada). EL vive en Su iglesia, no construida por
manos de hombre, sino en su corazón.

A Dios no podemos sorprenderlo en NADA; cuando creó los cielos y la

tierra y puso al hombre en el Edén, ya sabía que no podría resistir la
tentación de Satanás y tenía un plan de Salvación para ponerlo en práctica. 

Por eso ordenó la construcción del Tabernáculo con el modelo que es una representación bajo figuras terrenales, de las cosas celestiales.

Si hacemos una revisión del Libro de Apocalipsis, encontramos:

1:12- el candelero

2:17- el maná escondido

4:6- el mar de cristal (el lavatorio)

6:9- el altar de los sacrificios

8:3- el altar de oro (altar del incienso)

11:19- el arca del testimonio

Esta es la revelación de porque dice La Biblia que es Dios quien se acerca al hombre, no el hombre a Dios. Romanos 3:11 “No hay quien entienda, no hay quien busque a Dios”. ¿Por qué? Efesios 2:1 “Y él os dio vida a vosotros, cuando estabais muertos en vuestros delitos y pecados,”

 Un detalle que no debemos pasar sin atender es que Dios primero

ordenó construir el Arca, y ante ella iba a ministrar el Sumo Sacerdote
como  el mediador entre Dios y los hombres y después la construcción
de la tienda en donde se llevaría a cabo este servicio pues en Éxodo 25:8
dice: “Y harán un santuario para mí, y habitaré en medio de ellos”.

 Apocalipsis 1:5-- y de Jesucristo el testigo fiel, el primogénito de los

muertos, y el soberano de los reyes de la tierra. Al que nos amó, y nos
lavó de nuestros pecados con su sangre, 6- y nos hizo reyes y sacerdotes para Dios, su Padre; a él sea gloria e imperio por los siglos de los siglos.

Amén.

 El Apóstol Pedro nos recuerda nuestra identidad en 1 Pedro 2:9
[ El pueblo de Dios ] “Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio,

nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes
de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;”

Es ahora que entendemos, con esta identidad, que al cesar el sacerdocio Aarónico (Levita) con el advenimiento de Jesús, y después de su pasión,

muerte y resurrección; ya no estamos bajo la Ley y el Sumo Sacerdote
según la orden de Melquisedec ministra ante el Padre, y es nuestro
mediador. 1 Timoteo 2:5- “Porque hay un solo Dios, y un solo mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre,” 

Hebreos 8:1- [El mediador de un nuevo pacto] “Ahora bien, el punto principal de lo que venimos diciendo es que tenemos tal sumo sacerdote, el cual se sentó a la diestra del trono de la Majestad en los cielos,”        

Hebreos 12:24-”a Jesús el Mediador del nuevo pacto, y a la sangre rociada que habla mejor que la de Abel”.

1 Pedro 2:9- Nos identifica como reyes y sacerdotes y la segunda parte del versículo, nos dice cual es el propósito para el cual nos ha nombrado:

“para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a

su luz admirable”. El sacerdote, como la ofrenda, debía ser perfecto.

Jesús, el Cordero de Dios, perfecto en todo, fue el sacrificio ofrecido

por Dios para la salvación nuestra (Juan 3:16) y el pasaje bíblico de Levítico 21:17-23 describe al sacerdote que lo ofrecerá. Por lo tanto, el varón deberá ser perfecto, sin defecto: no ciego. La ceguera espiritual nos impedirá llevar el anuncio de  las virtudes de aquel que nos ha llamado a su luz. No debemos ser guías ciegos conduciendo ciegos. (Mateo 15:14). Solo Jesús nos puede devolver la  vista como hizo con un ciego de nacimiento en el estanque de Siloé (Juan 9). Ese era su ministerio terrenal,  (Lucas 4)

“Entonces los ojos de los ciegos serán abiertos, y los oídos de los

sordos se abrirán”. (Isaías 35:5)

El cojo o con el pie quebrado no puede movilizarse, no camina. Está

como el hombre que pedía limosna en la puerta Hermosa del Templo en Jerusalén. Si la cojera nos impide calzar el evangelio de la paz. (Efesios 6:14);

 “y calzados los pies con el apresto del evangelio de la paz.”; tampoco nos dirán que son hermosos nuestros pies cuando vamos a compartir las buenas nuevas de salvación. Romanos 10.14-15.

Nuestra auto estima no debe estar mutilada; porque valemos la sangre

de Cristo y sólo cuando valoramos nuestra vida podemos sentir dolor
por los que se pierden. Apreciemos la vida de un prójimo sin Cristo. Pero
hay que tener mucho cuidado con no estar “sobrados” porque una auto
estima muy alta nos puede hacer caer en la soberbia y ese está primero en la lista de las siete cosas que más aborrece Dios, en Proverbios 6::

 16- Seis cosas aborrece Jehová,
Y aun siete abomina su alma:

17- Los ojos altivos, la lengua mentirosa,
Las manos derramadoras de sangre inocente,

Por este pecado, Lucifer (Luz Bella, Ángel de Luz) perdió su sitio al lado

de Dios y fue expulsado de su presencia. Isaías 14:12-15-  !!Cómo caíste
del cielo, oh Lucero, hijo de la mañana! Cortado fuiste por tierra, tú que debilitabas a las naciones. 13- Tú que decías en tu corazón: Subiré al cielo; en lo alto, junto a las estrellas de Dios, levantaré mi trono, y en el monte del testimonio me sentaré, a los lados del norte; 14-sobre las alturas de las nubes subiré, y seré semejante al Altísimo. 15-Mas tú derribado eres hasta el Seol, a los lados del abismo.

Una mano quebrada no puede levantarse en alabanza a Dios.                   Salmo 134:2 “Alzad vuestras manos al santuario, Y bendecid a Jehová”.  Un jorobado espiritual camina viendo hacia abajo y por más esfuerzos que haga no puede ver al cielo, sólo lo terrenal. Un enano espiritual es el producto del que habla Santiago: Oidores de la Palabra pero nunca hacedores. No hay crecimiento porque toman leche adulterada. Es la condición en que caen los que se alimentan de comida chatarra y no estudian el Sagrado Texto.

 Muchos no se pueden considerar ciegos porque perciben algo de luz y

con mucha dificultad ven algunas imágenes y colores, porque una nube
en el ojo le impide ver con claridad. Y  un testículo magullado es signo de infertilidad. No podrá procrear hijos espirituales al servicio de Cristo. Y la sarna nos habla de las contaminaciones, del contagio de enfermedades espirituales.

 La sarna es una enfermedad típica de los cerdos, que viven en el lodo cenagoso. Sin embargo, la misericordia de Dios se manifiesta en que

podemos comer de lo santo, de su provisión, de lo santificado; pero no podemos entrar al Lugar Santísimo si hay defecto en nosotros, sus
sacerdotes. Dios quiere que nos presentemos como obreros calificados,
no como “calienta bancas” de las iglesias.

Recordemos que nos dice La Palabra de Dios que está lista la cosecha,

que la mies es mucha, y que se necesitan obreros. Mateo 9:38-“Rogad,
pues, al Señor de la mies, que envíe obreros a su mies.”

Lucas 10:2- “Y les decía: La mies a la verdad es mucha, mas los obreros

pocos; por tanto, rogad al Señor de la mies que envíe obreros a su mies.”

 y Juan 4:36- “Y el que siega recibe salario, y recoge fruto para vida eterna,  para que el que siembra goce juntamente con el que siega”.                                                 Amén.