Thursday, January 31, 2013


 

EL LIMBO:                                                                                                                 

Es el lugar a donde iban los niños que morían sin bautizarlos. Es una teoría del Vaticano que necesitó de una revisión porque aceptaron que es un invento para provocar miedo y forzar a los padres a que bautizaran a los recién nacidos. (El bautismo no es para Salvación). El católico lo es por ser registrado y bautizado siendo niño sin que manifieste su voluntad de serlo.

Misericordia divina: Un dogma de fe. Dios es misericordioso para la Iglesia Católica. (¿Solo para la ICAR?). Pero hasta ahora, al menos tradicionalmente, se aplicaba a los niños que morían sin bautizar, ya que eran mandados a ese “vacío legal” llamado limbo, y era imposible que llegaran al cielo.

Una comisión teológica internacional se encuentra revisando en el Vaticano la teoría del limbo, y todo indica que los teólogos decidirán deshacerse del limbo con esta premisa: la misericordia divina basta para enviarlos al cielo. (la misericordia moderna no la de antes)

No es un asunto de fe: Este “dogma” fue de máxima importancia para el Papa Juan Pablo II, quien ya encomendó en octubre de 2004 al actual papa Ratzinger la creación de esta comisión. Sin embargo, el limbo jamás ha sido reconocido como un dogma de fe, sino más bien como construcción de las discusiones teológicas (invento) desde el Medievo para saber qué ocurría con aquellos justos que morían sin ser bautizados, y por lo tanto con pecado original, lo que les impedía acceder al cielo. El limbo se convertía en una suerte de lugar donde reposaban las almas sin la presencia de Dios, sin sufrimiento, del mismo modo que los justos esperaron en el seno de Abraham a Cristo para poder salvarse. (No era condena ni salvación; ni chicha, ni limonada; no era muerte ni vida eterna)

A pesar de todo, la teología no le da importancia: “El limbo no tiene fundamento histórico ni bíblico, esta decisión llega algo tarde si tenemos en cuenta los sufrimientos innecesarios para muchos padres al pensar que su hijo no había ido al cielo al no estar bautizado”, dice Juan José Tamayo, catedrático en teología de la Universidad Carlos III. (Y peor, el dolor para los padres que murieron con la certeza de que su hijito no se salvó de la condenación eterna).

“Se trataba nada más que de un medio coercitivo basado en el miedo para obligar a los padres a que bautizasen a sus hijos”, añade.

Los Homosexuales

El último documento aprobado por el Papa Benedicto XVI prohíbe admitir en los seminarios y el sacerdocio a quienes practican la homosexualidad, presentan dichas tendencias profundas o apoyen la cultura gay. El mismo texto habla de la homosexualidad como inclinación «de-sordenada», aunque subraya que no se debe aplicar la discriminación con estas personas. El Vaticano dijo ayer que no se aplicará a los curas ya ordenados en el sacerdocio. (Estos no entrarán en la reforma…ni en el cielo; no discriminación homosexual retroactiva… pueden seguir amándose libremente)

Otros ajustes: (Correcciones de la Iglesia Catolica a la Palabra de Dios)

El infierno: El Vaticano rectificó en 1999 y dijo que el infierno no era un lugar, dándole la razón (¿Será que La Biblia está equivocada?) sino una situación en la que se encuentra el alma. (Un lago de fuego virtual)

La iglesia romana enseñaba antes del ajuste papal que: El catecismo de Trento, promulgado después del Concilio de Trento, al explicar los lugares donde están detenidas después de la muerte las almas privadas de gloria, enseña que “hay una tercera clase de cavidad, en donde residían las almas de los Santos antes de la venida de Cristo Señor Nuestro, en donde, sin sentir dolor alguno, sostenidos con la esperanza dichosa de la redención, disfrutaban de pacífica morada. A estas almas piadosas que estaban esperando al Salvador en el seno de Abraham, libertó Cristo Nuestro Señor al bajar a los infiernos” (Catecismo, parte 1, cap. 6:3).
El caso de Galileo: El físico Galileo Galilei, excomulgado de la Iglesia católica por defender las tesis copernicanas de que la Tierra giraba alrededor del sol, fue rehabilitado por Juan Pablo II en 1992, más de 300 años después de su muerte. (Sufrió del fuego que el Vaticano le recetó al mandarlo al infierno y Wojtyla lo vino a rescatar)

Inquisición: Juan Pablo II en sus Reflexiones de 1994 pidió perdón por la Inquisición, la violencia y la poca implicación de la Iglesia (Pio XII) contra el Holocausto. (¿Y las cruzadas, indulgencias, misas de muertos, reliquias, celibato, etc.?)

Sincretismo con otras religiones: En 1994, el Papa visitó el Sinaí para cerrar las heridas con judíos y musulmanes. (¿Cerrar las heridas será: renunciar a la Deidad de Cristo y creer que era solo un profeta?)

¿QUE ES EL PURGATORIO?                                                                                         
 
Otro invento que describen así: Es una prisión de fuego en la cual casi (¿Por qué casi?)  todas las almas salvadas son sumergidas después de la muerte y en la cual sufren las más intensas penas.

Testimonio de los más grandes doctores de la iglesia nos dicen acerca del Purgatorio: Tan lastimoso es el sufrimiento de ellas que un minuto de ese horrible fuego parece ser un siglo.
Santo Tomás Aquino, el príncipe de los teólogos (inventores) , dice que el fuego del Purgatorio es igual en intensidad al fuego del infierno, y que el mínimo contacto con él es más aterrador que todos los sufrimientos posibles de esta tierra! (¿Cómo lo supo si no lo leyó en la Biblia?)
San Agustín, el más grande de todos los santos doctores (inventores), enseña que para ser purificadas de sus faltas previo a ser aceptada en el Cielo, las almas después de muertas son sujetas a un fuego mas pe-netrante y terrible que nadie pueda ver, sentir o concebir en esta vida.

Aunque este fuego está destinado a limpiar y purificar al alma, dice el Santo Doctor, aún es más agudo que cualquier cosa que podamos resistir en la Tierra. (¿Se lo dijo Tomas de Aquino?)

San Cirilo de Alejandría no duda (está seguro que es invento) en decir que "sería preferible sufrir todos los posibles tormentos en la Tierra hasta el día final que pasar un solo día en el Purgatorio".
Otro gran Santo dice: Nuestro fuego, en comparación con el fuego del Purgatorio, es una brisa fresca".

Otros escritores hablan en idénticos términos de ese horrible fuego.

¿CÓMO ES QUE LAS PENAS DEL PURGATORIO SON TAN SEVERAS?

1.            El fuego que vemos en la Tierra fue hecho por la bondad de Dios para nuestra comodidad y nuestro bienestar. A veces es usado como tormento, y es lo más terrible que podemos imaginar. (Como las antorchas humanas de Nerón y la “santa” Inquisición)                                                                                                          
2.    El fuego del Purgatorio, por el contrario, está hecho por la Justicia de Dios para penar y purificarnos y es, por consiguiente, incomparablemente más severo.
3.     Nuestro fuego, como máximo, arde hasta consumir nuestro cuerpo; hecho de materia, por el contrario el fuego del Purgatorio actúa sobre el alma espiritual, la cual es inexplicablemente mas sensible a la pena.
4.     Cuanto más intenso es el fuego, mas rápidamente destruye a su víctima; la cual por consiguiente cesa de sufrir; por cuanto el fuego del Purgatorio infringe el más agudo y la más violenta pena, pero nunca mata al alma ni le quita sensibilidad.
5.     Tan severo como es el fuego del Purgatorio, es la pena de la separación de Dios, la cual el alma también sufre en el Purgatorio, y ésta es la pena más severa. El alma separada del cuerpo anhela con toda la intensidad de su naturaleza espiritual estar con Dios. Es consumida de intenso deseo de volar hacia Él. Aun es retenida, y no hay palabras para describir la angustia de esa aspiración insatisfecha
.

.   ¿Quiénes y cuándo han de ejercer el ministerio de la predicación?.  Concurran los fieles a oír la palabra de Dios en sus parroquias. Ninguno predique contra la voluntad del Obispo.      (Extraído de los decretos del Sacrosanto Concilio de Trento) 

Advierta también el Obispo con celo a su pueblo, que todos los fieles tienen obligación de concurrir a su parroquia a oír en ella la palabra de Dios, siempre que puedan cómodamente hacerlo. Mas ningún sacerdote secular ni regular tenga la presunción de predicar, ni aun en las iglesias de su religión contra la voluntad del Obispo. Cuidarán estos también de que se enseñen con esmero a los niños, por las personas a quienes pertenezca, en todas las parroquias, por lo menos en los domingos y otros días de fiesta, los rudimentos de la fe o catecismo, y la obediencia que deben a Dios y a sus padres; y si fuese necesario, obligarán aun con censuras eclesiásticas a enseñarles; sin que obsten privilegios, ni costumbres.                                                                        
 
DECRETO SOBRE EL PURGATORIO

Habiendo la Iglesia católica, instruida por el Espíritu Santo, según la doctrina de la sagrada Escritura y de la antigua tradición de los Padres, enseñado en los sagrados concilios, y últimamente en este general de Trento, que hay Purgatorio; y que las almas detenidas en él reciben alivio con los sufragios de los fieles, y en especial con el aceptable sacrificio de la misa; manda el santo Concilio a los Obispos que cuiden con suma diligencia que la sana doctrina del Purgatorio, recibida de los santos Padres y sagrados concilios, se enseñe y predique en todas partes, y se crea y conserve por los fieles cristianos. Exclúyanse empero de los sermones, predicados en lengua vulgar a la ruda plebe, las cuestiones muy difíciles y sutiles que nada conducen a la edificación, y con las que rara vez se aumenta la piedad. Tampoco permitan que se divulguen, y traten cosas inciertas, o que tienen vislumbres o indicios de falsedad. Prohíban como escandalosas y que sirven de tropiezo a los fieles las que tocan en cierta curiosidad, o superstición, o tienen resabios de interés o sórdida ganancia. Mas cuiden los Obispos que los sufragios de los fieles, es a saber, los sacrificios de las misas, las oraciones, las limosnas y otras obras de piedad, que se acostumbran hacer por otros fieles difuntos, se ejecuten piadosa y devotamente según lo establecido por la Iglesia; y que se satisfaga con diligencia y exactitud cuánto se debe hacer por los difuntos, según exijan las fundaciones de los testadores, u otras razones, por sacerdotes y ministros de la Iglesia.    Cuentan que el asunto del limbo fue considerado del "máximo interés" por Juan Pablo II a causa de un duro golpe que recibió en su infancia. Cuando Karol Wojtyla tenía nueve años, su madre falleció al dar a luz a una niña que vino al mundo muerta. Desde entonces, al Papa polaco nunca dejó de preocuparle el destino del alma de su hermana muerta. Además de crear esta comisión, el anterior papa se anticipó a sus conclusiones, ya que el limbo no aparece en el nuevo Catecismo, publicado bajo su pontificado en 1992. Ahora, al invocar la misericordia de Dios para salvarlos, la Iglesia destierra por siempre ese extraño lugar y asegura un pedazo de paraíso a los numerosos niños no bautizados. Además de que Wojtyla pudo salvar a su hermana; usando su influencia papal  como autoridad  de su iglesia.

 

 La problemática para la iglesia romana no acaba solo borrando el limbo del catecismo porque al dejar sentado en sus acuerdos que los niños muertos sin bautizar no se condenan; están aceptando la verdad bíblica de que el bautismo no es para salvación. Esta es por una relación personal con Cristo, que los niños no tienen; ya que tampoco hay salvación por lo que otro hagan por uno. Entonces, si no es por la fiesta con gran cantidad de comida y bebidas alcohólicas, ¿Por qué bautizan niños recién nacidos? ¿Cuál es el pecado original según la iglesia mariana? Pregunte a un católico. Ellos inventan respuestas para todo.

Sunday, January 20, 2013


                        LA UNCION

En  la Biblia se compara la unción del Espíritu Santo con el aceite. Comenzando por la factibilidad de que los dos pueden ser sentidos y experimentados; son una realidad palpable, gustable, audible, visible y aromática que sucede en la vida de los que creen en Cristo Jesús y su evangelio victorioso, le reciben como su Salvador y le obedecen.                                                                                             
 Haremos observaciones que tienen similitud y sentido común, de las cualidades y características del aceite, que pueden ayudarnos a comprender el obrar del Espíritu Santo. Primero: el aceite se evapora, y si no se lo reemplaza con regularidad, finalmente desaparece. Eso puede comprobarse, tanto en lo espiritual como en lo material y natural. Echa un poco de aceite en un recipiente, déjalo un tiempo prolongado sin utilizar y verás como, al cabo del tiempo se ha evaporado una porción. Al pasar más tiempo, veras que el recipiente está absolutamente vacío y que ni siquiera hay evidencia de que en algún momento haya tenido aceite. Es como si jamás nunca hubiera sucedido nada.
Claro que El Espíritu Santo no se evapora. Sin embargo, en cierto momento, podemos llegar a pensar que nunca ha estado allí. Debemos permitir que el aceite fluya sobre nosotros, refrescando nuestra vida espiritual. Esto hace la oración, una íntima comunión personal con Dios (no asistir a un templo una vez por semana) y la lectura de la Palabra de Dios. La unción permanece en nuestra vida si caminamos y hablando CON el Señor, no AL Señor. Cuando estamos en su presencia, sentimos que el aceite del Espíritu Santo corre en nuestra vida, refrescándolo y renovando nuestro espíritu.
Si en el recipiente en donde ponemos el aceite hay un orificio microscópico, por ahí se escurre. El hueco puede ser tan pequeño, invisible a simple vista, pero el aceite a corto o mediano plazo va a encontrar la manera de salirse por ahí.
EFESIOS 4.22-27 “En cuanto a la pasada manera de vivir, despojaos del viejo hombre, que está viciado conforme a los deseos engañosos, y renovaos en el espíritu de vuestra mente, y vestíos del nuevo hombre, creado según Dios en la justicia y santidad de la verdad. Por lo cual, desechando la mentira, hablad verdad cada uno con su prójimo; porque somos miembros los unos de los otros. Airaos, pero no pequéis; no se ponga el sol sobre vuestro enojo, ni deis lugar al diablo. Pablo nos advierte que no demos lugar al diablo. La palabra LUGAR, aquí, deriva de una palabra griega utilizada para Avenida o ventana. Un agujero en el recipiente del aceite. Es decir es que no dejemos la ventana abierta al diablo. Cuando el enemigo de nuestras almas viene a casa robarnos, si encuentra la puerta cerrada busca una ventana por donde entrar, o un hueco en el techo. Es la vieja y conocida historia: Si dejas la puerta de tu casa abierta y por allí se mete el perro de tu vecino y te muerde, ¿Quién tendrá la culpa? ¿El perro, tu vecino o tú por dejar la puerta abierta?
Las ventanas son producto del pecado no confesado, la amargura, resentimiento, egoísmo, autocompasión, falta de perdón y otras cosas semejantes que se nos infiltran. Es allí, donde la unción  del Espíritu se saldrá y dejará un vacío en nuestro espíritu.
Otra cualidad del aceite es que cuando está fresco tiene la debida densidad (espesor), para ser útil en un motor o una máquina. A ese espesor se le llama viscosidad, y es importante, puesto que esto determina la habilidad del aceite para resistir el calor y la presión y para reducir la fricción y la tensión. Cuanto más baja es la viscosidad, menos podrá el aceite resistir a la presión. Asi como el aceite del automóvil, debemos cambiarlo a una cierta cantidad de kilómetros porque además de ensuciarse con residuos de la combustión, pierde densidad, espesor, viscosidad, color y no es apto para proteger el motor. De la misma manera, nuestra unción va perdiendo viscosidad bajo el calor de la guerra espiritual.
Por lo que debemos poner atención a la oración y al estudio bíblico diarios para mantener el espesor y desarrollar fortaleza espiritual. ¿Cómo está nuestro aceite? ¿Lo hemos cambiado por aceite fresco o seguimos con una unción vieja? ¿Tenemos otro toque de Dios en nuestra vida?. No corramos el riesgo de dejar evaporarse nuestra unción.                                                                                                    
2 Timoteo 4: 13 “Trae, cuando vengas, el capote que deje en Troas
en casa de Carpo, y los libros, mayormente los pergaminos”.

Este pasaje de la Escritura, nos muestra la necesidad de Pablo por mantenerse estudiando los pergaminos y libros y nos sirve de ejemplo a seguir. Alimentemos nuestro espíritu para que la unción se mantenga fresca y no caer en una actividad religiosa habitual; porque esta es el residuo de una realidad pasada y lo que quita viscosidad a nuestro aceite.

 El aceite fresco, tiene aroma fragante y delicioso. Pero que desagradable es el olor del aceite rancio y podrido. Es repulsivo. Así como el aceite material, también sucede en lo espiritual. La fragancia espiritual está asociada con el pueblo de Dios. Sus vidas están llenas del aceite fresco del Espíritu, y sentimos una dulce fragancia. Cuando el aceite se ha envejecido y la carne prevalece, se contamina y despide un olor desagradable.

 1 Samuel 10: 6 “Entonces el Espíritu de Jehová vendrá sobre ti con poder, y profetizarás con ellos, y serás mudado en otro hombre. Este pasaje del libro de Samuel, refiere el ungimiento que hiciera Samuel a Saúl con aceite. Saúl fue transformado; porque la unción convierte al cristiano, en una persona diferente. En una nueva criatura.

2 Samuel 1: 21 “Montes de Gilboa, ni rocío ni lluvia caiga sobre vosotros, ni seáis tierras de ofrendas; porque allí fue desechado el escudo de los valientes, el escudo de Saúl, como si no hubiera sido ungido con aceite.” Saúl no perseveró en oración y meditación de la Escritura y dejó que su vieja naturaleza le hiciera desobediente. No dio mantenimiento a su unción. Los guerreros debían cuidar sus armas. Los escudos, hechos de piel, tenían que ser frotados con aceite para preservarlos de la humedad y desecamiento. Este "frotar con aceite" es símbolo de la unción. Dice la Escritura, Saúl llegó a ser el escudo de Saúl "como si no hubiera sido ungido con aceite". Él había perdido esta bendición a causa del pecado de desobediencia cuando ofreció sacrificio por temor a que el juez y profeta Samuel no llegara a efectuarlos. Saúl vició las normas establecidas por Dios para los oficios de juez y profeta. Él pecó, y Dios le miró como si nunca hubiera sido ungido.

1 Samuel 13: 11 “Entonces Samuel dijo: ¿Qué has hecho? Y Saúl respondió: Porque vi que el pueblo se me desertaba, y que tú no venías dentro del plazo señalado, y que los filisteos estaban reunidos en Micmas, (12) me dije: Ahora descenderán los filisteos contra mí a Gilgal, y yo no he implorado el favor de Jehová. Me esforcé, pues, y ofrecí holocausto.”     (13) Entonces Samuel dijo a Saúl: Locamente has hecho; no guardaste el mandamiento de
Jehová tu Dios que él te había ordenado; pues ahora Jehová hubiera confirmado tu reino sobre Israel para siempre. (14) Mas ahora tu reino no será duradero. Jehová se ha buscado un varón conforme a su corazón, el cual Jehová ha designado para que sea príncipe sobre su pueblo, por cuanto tú no has guardado lo que Jehová te mandó.


 Judas Iscariote perdió la unción. Jesús le había dicho a él y a los otros once: " Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios; de gracia recibisteis, dad de gracia”. (Mateo 10.8)  Mas Judas perdió la unción y el diablo entró en él y por unas monedas de plata traicionó a Jesús.                                                                             

 

Lucas 12: 47 “Aquel siervo que conociendo la voluntad de su señor, no se preparó, ni hizo conforme a su voluntad, recibirá muchos azotes.(48) Mas el que sin conocerla hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco; porque a todo aquel a quien se haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le haya confiado, más se le pedirá”. En hebreo, la palabra unción es la palabra MASHACH, que significa "frotar". En griego, unción es la palabra CHRISM, que significa "untar" de aquí viene la palabra Carisma. Jesús es el que bautiza con Espíritu Santo y fuego. Pidámosle que la unción caiga sobre nosotros.

En el Salmo 23:5 David dice: “Unges mi cabeza con aceite: mi copa está rebosando David pastoreaba en el desierto y los pastores ungían sus ovejas con aceite de oliva para refrescarlas del calor y ahuyentar a los insectos que las molestaban.

En el Capitulo 5 de su libro, Santiago nos exhorta a orar los unos por los otros, enseñándonos el poder e la intercesión. Dice que oremos si  estamos afligidos y  que cantemos alabanzas cuando haya alegría en nuestras vidas. Que si alguno está enfermo que llame a los ancianos de la iglesia para que orando por el, lo unjan con el Espíritu Santo.  Santiago 5:13 ¿Está alguno entre vosotros afligido? Haga oración. ¿Está alguno alegre? Cante alabanzas. 14 ¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor. 15 Y la oración de fe salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si hubiere cometido pecados, le serán perdonados. 16 Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados. La oración eficaz del justo puede mucho”

Después del recorrido corto por algunos versículos de La Biblia, hemos comprobado nuevamente que La Palabra de Dios utiliza conocimientos básicos de la vida cotidiana del pueblo para que sus enseñanzas se nos faciliten. Hemos usado el aceite de motor,que sin duda no era conocido en los tiempos de Jesús. La Biblia compara el aceite de oliva como simil de la unción del Espíritu Santo.

Es fácil entender que Santiago 5:14 no se refiere en manera alguna que se llame a los ancianos para que vengan con un recipiente de aceite de oliva a “ungir” al enfermo derramándolo sobre su cabeza. Esa recomendación ha sido mal interpretada y actualmente algunas iglesias evangélicas copian a las católicas untando aceite antes de orar como muestra inequívoca del grado de religiosidad que hay en esa iglesia en particular. Otros hermanos, pecando de exagerados, aceitan las bancas y las paredes del edifico. Además debe tenerse en cuenta que en Antiguo Testamento, el Espíritu Santo sólo llegaba a ciertas personas y asi como en el caso de Saúl, también se iba. Con el advenimiento de Jesús, la Gracia ocupó la dispensación de la Ley escrita y Jesús prometió a su iglesia otro Consolador y el Espíritu Santo hizo morada en el corazón del creyente. Ese “aceite” mora en nosotros y no tiene ninguna relevancia si embadurnamos de aceite de oliva, de maíz, de girasol o industrial. Ni porque el aceite venga embotellado y fabricado en Tierra Santa y las aceitunas sean del Monte de los Olivos, tenga más poder que los otros. El Poder vino el día de Pentecostés al Aposento Alto y llenó a TODOS los que perseveraron en oración, juntos, unánimes. En las iglesias que he conocido, se sabe quién es ujier, anciano, pastor o músico; pero nunca he conocido a un “perfumador” para hacer aceite de la santa unción.   Exodo 30:25 “Y harás de ello el aceite de la santa unción; superior ungüento, según el arte del perfumador, será el aceite de la unción santa. 26 Con él ungirás el tabernáculo de reunión, el arca del testimonio, 27 la mesa con todos sus utensilios, el candelero con todos sus utensilios, el altar del incienso, 28 el altar del holocausto con todos sus utensilios, y la fuente y su base. 29 Así los consagrarás, y serán cosas santísimas; todo lo que tocare en

 

ellos, será santificado. 30 Ungirás también a Aarón y a sus hijos, y los consagrarás para que sean mis sacerdotes. 31 Y hablarás a los hijos de Israel, diciendo: Este será mi aceite de la santa unción por vuestras generaciones. 32 Sobre carne de hombre no será derramado, ni haréis otro semejante, conforme a su composición; santo es, y por santo lo tendréis vosotros.                                                                                          
La iglesia católica tiene aceites especiales para ritos en los niños y otro para los muertos; o quizás usan el mismo. ¿Y el incienso? Los mayas usaban el de Copal. Los yerberos venden sahumerio para espantar mosquitos. Pero la lectura bíblica nos enseña cual es el incienso verdadero en Apocalipsis 5:8 leemos: Y cuando hubo tomado el libro, los cuatro seres vivientes y los veinticuatro ancianos se postraron delante del Cordero; todos tenían arpas, y copas de oro llenas de incienso, que son las oraciones de los santos”. Y también La Escritura nos enseña que los santos no son los humanos canonizados por el Vaticano; sino los creyentes de la iglesia de Jesucristo que han sido apartados por Dios y para Dios. Aunque no se les vea una ruedita luminosa sobre la cabeza y los ojos trabados.

Exodo 35:8 “aceite para el alumbrado, especias para el aceite de la unción y para el incienso aromático”.

 Que claro está que había un aceite para la unción, otro para el alumbrado, uno perfumado que usaban las mujeres y otro para la comida (Mezclaban harina y aceite para hacer pan)                                         
Es el momento perfecto para preguntar: ¿De cuál aceite untan al hermano en las iglesias?                                                                
Porque el aceite de la unción tenia especificaciones particulares: Exodo 30:23-32 “Tomarás especias finas: de mirra excelente quinientos siclos, y de canela aromática la mitad, esto es, doscientos cincuenta, de cálamo aromático doscientos cincuenta, 24 de casia quinientos, según el siclo del santuario, y de aceite de olivas un hin. 25 Y harás de ello el aceite de la santa unción; superior ungüento, según el arte del perfumador, será el aceite de la unción santa. 26 Con él ungirás el tabernáculo de reunión, el arca del testimonio, 27 la mesa con todos sus utensilios, el candelero con todos sus utensilios, el altar del incienso, 28 el altar del holocausto con todos sus utensilios, y la fuente y su base. 29 Así los consagrarás, y serán cosas santísimas; todo lo que tocare en ellos, será santificado.     
30 Ungirás también a Aarón y a sus hijos, y los consagrarás para que sean mis sacerdotes. 31 Y hablarás a los hijos de Israel, diciendo: Este será mi aceite de la santa unción por vuestras generaciones. 32 Sobre carne de hombre no será derramado, ni haréis otro semejante, conforme a su composición; santo es, y por santo lo tendréis vosotros.  Entonces, este no es. El de olivas machacadas no es tampoco porque ese sirve para el alumbrado Exodo 27:20 “Y mandarás a los hijos de Israel que te traigan aceite puro de olivas machacadas, para el alumbrado, para hacer arder continuamente las lámparas.”                                                                                                       
No puede ser el ungüento o aceite perfumado que Cantares 4:14 describe de que estaban hechos los ungüentos aromáticos de las mujeres:

Nardo y azafrán, caña aromática y canela,
Con todos los árboles de incienso;
Mirra y áloes, con todas las principales especias aromáticas.”


Al final nos queda el aceite industrial que se usa para lubricación de los motores de automóviles; lubricar maquinas de coser, bicicletas, armas, herramientas, bisagras de puertas; que tampoco lo podemos aplicar en la frente de un hermano. Y como ultimo recurso solo nos queda el aceite que se aplica a bebés en la piel. La iglesia Universal en California está usando en sanación el “aceite santo de Israel” al que en la TV le dan gracias porque les quitó de los vicios, los sanó de un cáncer o del hígado.  Pregunto de nuevo:
¿Cuál usan en las iglesias para aceitar creyentes?

CONCLUSION:  ¿Qué es la unción de Dios? PODER divino que viene sobre ti y te separa de ti mismo y te llena de Su Santo Espíritu. Como resultado de ello, cuando hablas transmites el mensaje que Dios te puso en el corazón. Además de recibir liberación de todas tus ataduras: “Acontecerá en aquel tiempo que su carga será quitada de tu hombro, y su yugo de tu cerviz, y el yugo se pudrirá a causa de la unción (Isaías 10:27)                                   

Wednesday, January 16, 2013

EL FUGITIVO
  Versión Reina Valera 1960                Lectura    Samuel 18:5             
Y salía David a dondequiera que Saúl le enviaba, y se portaba prudentemente. Y lo puso Saúl sobre gente de guerra, y era acepto a los ojos de todo el pueblo, y a los ojos de los siervos de Saúl.”                                       
1 Samuel 19: 11”Saúl envió luego mensajeros a casa de David para que lo vigilasen, y lo matasen a la mañana. Más Mical su mujer avisó a David, diciendo: Si no salvas tu vida esta noche, mañana serás muerto. 12- Y descolgó Mical a David por una ventana; y él se fue y huyó, y escapó”.
 Estos versículos nos testifican que David era obediente a las autori dades, tenía una conducta prudente, y que era acepto a los siervos de Saúl y a todo el pueblo. Este comportamiento también lo hacía agradable a los ojos de Dios; pero el rey deseaba su muerte y se convirtió en un fugitivo.  David, un hombre conforme al corazón de Dios (Hechos 13:22) que vivió en el anonimato los primeros años de su juventud.  Con una vida solitaria y monótona: era el menor de sus hermanos, dedicado a cuidar ovejas, aprendiendo música, obediente a su padre.
 Es un periodo de formación, en el que está entrenándose como guerrero luchando contra el león y el oso defendiendo sus ovejas. Está siendo fiel en lo pequeño, y preparándose, sin saberlo, para ser grande en el futuro.
 Tras el éxito en la batalla contra Goliat  en el palacio, es odiado y perseguido por Saúl. Después de la promesa divina de ser rey, estuvo trece años de espera, con periodos de depresión, soledad, desierto, traición y dolor. Dios tiene Su tiempo y lo hace sin prisa, y David supo esperar a que llegara su tiempo. Era  menospreciado por los familiares cercanos (1 Samuel 16,17) porque no es tenido en cuenta en el rol familiar. Siendo el menor de los ocho hermanos, su pedre lo hizo  el responsable  del cuido de las ovejas. Malentendido (17:28-30) pero lejos de discutir o rebelars continúadasus labores. Fue fiel en las pequeñas responsabilidades y aprovechó la oportunidad que tuvo de luchar contra Goliat.  Recordemos que estuvo años practicando con su honda y pequeñas piedras (y buena música de arpa).                                                              
Ni los soldados de Israel, ni los filisteos pudieron pensar que ese muchacho pastor de ovejas había  renunciado a usar la armadura y las armas del rey Saúl, fue  armado con su bastón, una honda y cinco piedras tomadas del rio podría a enfrentar al gigantesco filisteo  de tres metros de altura y experimentado en batallas. Pero el arrojo y valentía de David no radicaban en él mismo, sino en su confianza en Dios, como se lo dijo a Goliat-  que lo hacía en el Nombre de Dios. Samuel 17:45-Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has provocado. 46- Jehová te entregará hoy en mi mano, y yo te venceré, y te cortaré la cabeza, y daré hoy los cuerpos de los filisteos a las aves del cielo y a las bestias de la tierra; y toda la tierra sabrá que hay Dios en Israel.  47-Y sabrá toda esta congregación que Jehová no salva con espada y con lanza; porque de Jehová es la batalla, y él os entregará en nuestras manos.  48- Y aconteció que cuando el filisteo se levantó y echó a andar para ir al encuentro de David, David se dio prisa, y corrió a la línea de batalla contra el filisteo.  49- Y metiendo David su mano en la bolsa, tomó de allí una piedra, y la tiró con la honda, e hirió al filisteo en la frente; y la piedra quedó clavada en la frente, y cayó sobre su rostro en tierra.               
18:6- Aconteció que cuando volvían ellos, cuando David volvió de matar al filisteo, salieron las mujeres de todas las ciudades de Israel cantando y danzando, para recibir al rey Saúl, con panderos, con cánticos de alegría y con instrumentos de música. 
7- Y cantaban las mujeres que danza-ban, y decían: Saúl hirió a sus miles,
Y David a sus diez miles.

 8-  Y se enojó Saúl en gran manera, y le desagradó este dicho, y dijo: A David dieron diez miles, y a mí miles; no le falta más que el reino.
 9- Y desde aquel día Saúl no miró con buenos ojos a David.
10- Aconteció al otro día, que un espíritu malo de parte de Dios tomó a Saúl, y él desvariaba en medio de la casa. David tocaba con su mano como los otros días; y tenía Saúl la lanza en la mano.
11- Y arrojó Saúl la lanza, diciendo: Enclavaré a David a la pared. Pero David lo evadió dos veces.
Cuando Saúl se dio cuenta que Jehová estaba con David y se había apartado de él; lo nombró jefe de mil y lo alejó de sí. (12,13) pero David se portaba prudentemente (14-16) y el pueblo lo amaba. Después de esta victoriosa experiencia, David volvió a caer en un periodo de aflicción. Fugitivo y perseguido (1 Samuel 19:12)  La experiencia de huir en el desierto o de la cueva, fue uno de los periodos más difíciles de su vida. Perdió casi todo: su posición en el ejército y la corte, a su esposa Mical, su consejero espiritual Samuel, su gran amigo Jonatán, e incluso el respeto a sí mismo. Así Dios le enseñó a depender sólo de Él. Fue en este tiempo cuando compuso algunos de sus Salmos más conocidos. Podemos conocer más a David por lo que él escribió que por lo que escribieron de él.                                                                                                      
Los Salmos son el clamor profundo del corazón, expresando a Dios su desilusión, dudas, depresión, y dolor, buscando en Él consuelo y esperanzas; dejando prueba de la revelación que Dios le dio: Jesús fue profetizado en la cruz por David en el Salmo 22. Estas experiencias difíciles que todos podemos tener (muerte de familiares, falta de trabajo, enfermedad) son momentos para expresarlos a Dios, darle gracias y esperar en Él.
David era impetuoso, apasionado y precipitado, con deseos de hacer lo bueno por lo que a menudo se equivocaba   (2 Samuel 6). Tuvo la buena idea de llevar el Arca a Jerusalén y restablecer la adoración en Jerusalén.  Hizo caso omiso de las ordenanzas que decían que debía de ser llevada con varas, (Éxodo 25:14, Números 4:15,20)  y la  transportaba en un carro. Las consecuencias fueron terribles: la muerte de Uza y la paralización del traslado.
Meses después, David lo planeó y ejecutó según las ordenanzas. Esta vez fue un  éxito y el Arca volvió a Jerusalén con gran regocijo. Muchas de nuestras decisiones, aunque puedan ser en el fondo correctas, pueden ser erróneas en la forma. Debemos de hacer lo bueno en el qué y en el cómo.
El pecado y sus consecuencias (2 Samuel 11,12 en adelante).
No importa cuán grande llegue a ser un hombre, siempre  puede caer en el abismo: adulterio, asesinato, engaño y mentira durante varios meses, hasta que el profeta Natán le señala y dice: “Tú eres aquel hombre” (12:7

Alguien dijo que hay cuatro “F  Fatales”: Faldas, Fortuna, Fama y Familia.  Estas son causa de la mayoría de las caídas, especialmente en los líderes.
 Cuando venimos a Cristo confesándole nuestros pecados y pidiéndole perdón por haberlo ofendido; y con el firme propósito de cambiar el rumbo de nuestra vida, apartándonos de la vida que llevábamos antes de conocerlo, El nos perdona y sentimos paz en muestro corazón. No recibimos amnesia a los pecados que cometimos. Nos queda el recuerdo para poder valorar de donde nos ha sacado el Señor y pagamos las consecuencias. David escribió en el Salmo 51 el reconociendo de su pecado y es perdonado, pero las consecuencias fueron terribles. Su familia fue un desastre, y el palacio real un total descontrol: violaciones, asesinato entre hermanos, sublevaciones, exilio, muertes y dolor que acompañaron a David hasta el final de sus días. En el periodo de persecución tuvo que fingir demencia para librar su vida:
1 Samuel 21:12-Y David puso en su corazón estas palabras, y tuvo gran temor de Aquis rey de Gat. 13- Y cambió su manera de comportarse delante de ellos, y se fingió loco entre ellos, y escribía en las portadas de las puertas, y dejaba correr la saliva por su barba. 14- Y dijo Aquis a sus siervos: He aquí, veis que este hombre es demente; ¿por qué lo habéis traído a mí?
15- ¿Acaso me faltan locos, para que hayáis traído a éste que hiciese de loco delante de mí? ¿Había de entrar éste en mi casa?”                      

El gran rey que supo regir todo un país, no pudo liderar su propia familia.                                                                                                         
David fue un hombre conforme al corazón de Dios. En su vida encontramos muchas altas y bajas, errores y aciertos, alegría y sufrimientos; victorias, conquistas y derrotas, cantos y lamentaciones, pero el resultado final fue una vida apasionada con Dios, conforme a su corazón.                                                 

Tuesday, January 15, 2013


¿MANDATO O COSTUMBRE?

Reina Valera 1960     1 Corintios 11:2-16

Hay gran controversia en esta parte de la Palabra de Dios. Muchos sinceramente creen que Pablo ordena que la mujer cristiana use un velo cuando ora y otros igualmente sinceros, piensan que el apóstol está sólo regulando una costumbre de aquel tiempo y que el uso de tal velo no es materia de fe.

Tengamos presente que el apóstol Pablo escribió sus epístolas a gente del primer siglo de la Era Cristiana y sus costumbres (no las nuestras) están en perspectiva cuando Pablo escribió; y es evidente que tales costumbres han variado grandemente en el transcurso de más de 2,000 años. Entendamos lo que hacían y por qué lo hacían.

OTRAS  COSTUMBRES  ANTIGUAS

No por ser una costumbre general, constituye un mandato de Dios. Leamos en La Escritura y meditemos, por ejemplo, el lavar los pies unos a otros como un gesto de hospitalidad. Cuando un invitado llegaba a la casa, lo primero que hacía el anfitrión era lavarle los pies. No hacerlo se consideraba como una descortesía (Lucas 7:44)                 
Hoy en día, si alguien viene a nuestra casa, no le lavamos los pies; porque no es nuestra costumbre. Lo invitamos a pasar, le ofrecemos un asiento y un refresco, café, jugo, o a comer con nosotros. Esta es nuestra manera de mostrar la hospitalidad. El lavacro de pies pasó a la historia hace muchos siglos; ¿Porqué? Por ser una costumbre del Medio Oriente no un mandamiento. Un legalista nos citaría el mandato de Jesús cuando lavó los pies a los apóstoles. (Juan 13:3-10). O argumentaría sobre esta práctica, citando 1 Timoteo 5:10, donde se infiere que era una costumbre bastante arraigada en aquel tiempo, muy digna de tomarse en cuenta como punto dogmático.

AUTORIDAD Y SUJECIÓN:

Aunque debemos tener claro que el tema principal de 1 Corintios 11:2-16 no es el "atavío de la mujer", sino el órden de autoridad. Los títulos a los párrafos de la Biblia fueron añadidos después y no siempre fueron atinados.

El apóstol Pablo escribió, "Cristo es la cabeza de todo varón, y el varón es la cabeza de la mujer, y Dios la cabeza de Cristo”. Deja claro que el tema trata del orden: Dios Padre> Cristo> marido> mujer; mencionando el velo (cubierta) en la mujer sólo incidental. Antiguamente, la mujer mostraba sujeción a la autoridad del marido usando un velo que la cubría a la vista de otros hombres. (Génesis 3:16; 1 Corintios 11:3; 1 Timoteo 2:11,12; Efesios 5:22,23)

 

Ha sido siempre la voluntad de Dios que la mujer muestre sujeción al hombre. ¿Cómo y cuándo comenzó la costumbre del velo? Es incierto. Lo que sí se sabe es que las mujeres orientales lo usaban muchos siglos antes del advenimiento de Cristo. Pero no hay prueba alguna de que Dios ordenara el uso del velo (o la cubierta) como mandamiento. El Señor sí mandó la sujeción, pero el hombre instituyó el velo como símbolo de tal sujeción; así como también instituyó el lavamiento de pies en muestra de hospitalidad. Está bien claro que eran costumbres sociales de aquel tiempo.

Los cristianos conocemos el poder del ayuno; pero el Señor tampoco hizo de éste un mandamiento, es una necesidad nuestra; ni mandó levantar las manos al orar. Ambas eran costumbres religiosas, Los primeros cristianos ayunaban (Hechos 13:3) y levantaban las manos al orar (1 Timoteo 2:8).¿Estamos los cristianos de hoy obligados a seguir las costumbres de hace dos mil años? Entonces, los pastores que defienden el uso del velo y lo imponen a las hermanas como una ley del Nuevo Testamento, forzosamente tienen que aceptar como mandamiento y ordenar en las iglesias el lavacro de pies, el ayuno, levantar las manos al orar, ungir con aceite y usar túnica hasta los pies. ¿Citas bíblicas? Aquí están:

1. Para el lavacro de pies, "... vosotros también debéis lavaros los pies los unos a los otros. Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis". (Juan 13:14-15)

2. ayuno, "Entonces, habiendo ayunado y orado, les impusieron las manos y los despidieron”. (Hechos 13:3; 14:23)

3. Para el levantar las manos al orar, "Quiero, pues, que los hombres oren en todo lugar, levantando manos santas, sin ira ni contienda". (1 Timoteo 2:8)

 4. aceitar a los hermanos…¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con aceite en el nombre del Señor                                                                                         
5. Para la túnica hasta los pies, "Asimismo que las mujeres se atavíen de ropa decorosa, con pudor y modestia" ¿Cuál era la ropa decorosa de hace 2,000 dos mil años? No una falda ni pantalón. Pablo se refiere en 1 Timoteo 2:9 a la túnica llamada "katastole", es decir, una prenda del cuello hasta los pies. De donde viene la palabra "estola", vestidura griega y romana del tiempo bíblico. Por eso, ¿las mujeres debieran llevar el vestido hasta los pies? De no hacerlo así estarían pecando por mostrar las piernas. Las cortesanas de aquel tiempo hacían una abertura o rajadura en la túnica, para mostrar parte de la pantorrilla. Se les llamaba "fainomarides", o sea, "mostradoras de pantorrilla", claramente una vergüenza. ¿Diremos a las hermanas que usan el vestido o falda hasta la rodilla que no es "ropa decorosa"?

Además ¿pecamos por no besarnos unos a otros con "ósculo santo" al saludarnos? porque el apóstol Pablo dijo: "Saludaos los unos a los otros con ósculo santo. Os saludan todas las iglesias de Cristo”. (Romanos 16:16).

Los pastores que quieran imponer el velo en las hermanas también deben de requerir el "beso santo", imposición de manos, ungir con aceite (oración), lavar los pies…  Aquellos pastores que imponen en su iglesia como mandamiento el velo por legalismo, también  enseñar como mandamiento todas las cosas ya mencionadas, a fin de que su propia conciencia ne les acuse de ser parciales e inconstantes con lo que predican

LENGUAJE.

Ahora tratemos el tema del velo más ampliamente. Es fácil ver que Pablo está considerando esa prenda de vestir sólo como una costumbre, con la cual la mujer mostraba su sujeción al hombre. Si el apóstol estuviera haciendo referencia a algo que Dios mandó, entonces no fue fiel a su educación y usó reglas gramaticales muy extrañas en su epístola. Fijémonos bien en lo que dice:

"Todo varón que ora y profetiza con la cabeza cubierta afrenta su cabeza... toda mujer que ora o profetiza con la cabeza descubierta afrenta su cabeza”.  La palabra "afrentar" es la traducción de la palabra griega que significa "avergonzar". Así es que la mujer que oraba o profetizaba con la cabeza descubierta avergonzaba a su marido. Dicho de otro modo, tal mujer estaba insultando a su marido. ¿Porqué Pablo dice que el varón que profetiza con la cabeza cubierta afrenta su cabeza y los judíos usan un gorro o una manta cubriéndola? ¿Porqué ella sin el velo "ofendía" a su marido?¿Por qué no dice que lo que ella hacía era pecaminoso y contrario a "lo que vosotros habéis aprendido"? (Romanos 16:16-17) Porque su manera de expresarse indica que él estaba refiriéndose a una COSTUMBRE social o religiosa como las monjas católicas. El varón  quería indicar que sobre su cabeza había cobertura. Es la misma razón de las actuales kippah, el sombrero o el turbante en los árabes. Pero algunas mujeres se quitaban el velo, violando una costumbre en aquel tiempo. Menciona que se lo quitaban, no la causa; y aun en nuestros días se oye decir: “Esa mujer no se viste como mujer casada” porque no se ve la señal en el vestir.

Pablo se tomó la molestia de corregir esta práctica, aunque solo era una costumbre y no un mandamiento. Porque un cristiano puede pecar ya sea que desatienda a las costumbres, como si desobedece a un mandato de Dios.         (1 Corintios 9:19-21, Hechos 21:17-26) Y es que los cristianos no nos escandalizamos por las costumbres, sino que las aceptamos por el bien de la Obra. Era importante para la mujer en Corinto estar sujeta al marido  como también que lo mostrara, usando un velo.

2. "Porque si la mujer no se cubre, que se corte también el cabello; y si le es vergonzoso a la mujer cortarse el cabello o raparse, que se cubra”. (v. 6) Dice: "SI". Si le es vergonzoso A LA MUJER. Este es un lenguaje poco usual en Pablo, porque si estuviera mandando un "así dice el Señor", un asunto de fe y doctrina, no hubiera dicho "si" (condicional). Hubiera dicho "puesto que" (conclusivo). No habría dicho que era una vergüenza, sino que era un pecado. Quitarse el velo la mujer, era una vergüenza PARA ELLA; no un pecado y una vergüenza HACIA DIOS.

3. "Por lo cual la mujer debe tener señal de autoridad sobre su cabeza". (v. 10). Un argumento muy débil, si es que el apóstol está tratando un asunto divino. El "debe tener" indica una responsabilidad, una obligación o compromiso hacia su autoridad (el marido) por la costumbre o tradición.

4. "Juzgad vosotros mismos: ¿Es PROPIO que la mujer ore a Dios sin cubrirse la cabeza"? (v. 13)    ¿Juzgad VOSOTROS?  Es imposible creer que el apóstol esté haciendo del velo un mandamiento cuando leemos este versículo. Pablo no está preguntando a los corintios su creencia, sino su OPINIÓN respecto al velo. Tampoco les dice que el velo era requerido por Dios. Lo que les dice es que juzguen ellos (no Dios) si una mujer sin velo ora y que si era "propio" (decente, correcto). Si el tema fuera materia doctrinal, no hubiera nada que ellos pudieran "juzgar". Juzgaría Dios. Pablo no preguntaría nunca que opinan en asuntos de fe (divinos) sino, hubiera dicho: "No le es PERMITIDO a la mujer orar sin velo". Este versículo está dando más énfasis al hecho de que Pablo sólo estaba regularizando una costumbre.

5. "La naturaleza misma, ¿no os enseña que al varón le es deshonroso dejarse crecer el cabello"? (v.14) ¿Quién enseña que al varón le es deshonroso (vergonzoso) dejarse crecer el cabello? ¿La Palabra de Dios? ¡NO! Es la naturaleza. La palabra "naturaleza" indica o significa las cosas como son; se refiere a las costumbres corrientes del tiempo en que se vive, a las tradiciones universalmente observadas, a las cosas o costumbres que a los ojos de la gente son correctas o propias. Así, es fácil comprender que en el tiempo de Pablo, la gente consideraba vergonzoso e impropio que los hombres trajeran el pelo largo. Era esto una vergüenza para el hombre, no para Dios.

Este versículo (v.14) es la llave para entender todo el pasaje de 1 Corintios 11:2-16. El apóstol sólo está discutiendo o argumentando lo que la naturaleza enseña: La naturaleza misma, ¿no os enseña que todo varón que ora o profetiza con la cabeza cubierta afrenta su cabeza? (v.4) La naturaleza misma, ¿no os enseña que es vergonzoso para la mujer cortarse el cabello o raparse? (v.6) Etc. Todas estas frases nos demuestran una aceptación de costumbres de parte de aquellas personas habituadas a ellas en el primer siglo.

6. "... si alguno quiere ser contencioso, nosotros no tenemos tal costumbre, ni las iglesias de Dios", (v.16) ¿Qué causaba que "alguno" quisiera ser contencioso? Y ¿Cuál era la "costumbre" que "nosotros" ni las iglesias de Dios tenían? Estas preguntas son difíciles de contestar, pero tenemos confianza en que la respuesta se encuentra en los primeros 15 versículos del capítulo en cuestión Veamos: COSTUMBRES QUE NO TENÍAN.

De hecho, hay por lo menos dos cosas en las cuales "alguno" pudiera ser contencioso. Pudiera serlo respecto a la cuestión de usar o no usar el velo, o bien, pudiera ser contencioso respecto al razonamiento de Pablo tocante al velo. Pero es obvio que el lenguaje del apóstol ni remotamente sugiere que el velo fuera asunto de doctrina; así lo demuestra su fraseología. Decir que el velo es materia doctrinal es mera asunción, presunción o conjetura.

La frase, "Nosotros no tenemos tal costumbre, ni las iglesias de Dios", algunos piensan que significa:"Nosotros no tenemos tal costumbre de usar el velo cuando oramos o profetizamos". La frase adicional, "ni las iglesias de Dios", están identificando otras congregaciones que tenían la costumbre del velo.

Si era una costumbre general en todas las iglesias que las mujeres s« cubrieran cuando oraban o profetizaban en aquel tiempo, y Pablo dice "nosotros no tenemos tal costumbre", eso en ninguna manera significa que fuera un mandamiento para ellos o para nosotros hoy en día, ¡ni para nadie! No lo es porque la composición gramatical no lo permite. Note usted las frases que usa el apóstol Pablo:

(1) ". . . toda mujer. . . afrenta (avergüenza) su CABEZA". ¿Quién es su cabeza? su esposo. (Efesios 5:23) No afrenta a Cristo, tampoco a Dios.

(2) "si le es vergonzoso. A LA MUJER". No dice Pablo que sea pecaminoso, sino vergonzoso para ella y una afrenta (vergüenza) para su marido.

(3) "Juzgad VOSOTROS mismos: Es PROPIO…" Dice Pablo que ellos (los corintios) podían juzgar, es decir, emitir un juicio correcto en el asunto del velo. 'No era éste un asunto de DIOS, sino de ELLOS. Ellos eran los contenciosos ("hay entre vosotros contiendas ". (1 Corintios 11:1; 16). Y la frase "es propio" equivale a "es correcto, es adecuado, es conveniente". (Diccionario Larousse Ilustrado). Por eso, es propio, adecuado o conveniente que la mujer no afrente a su cabeza, el varón, su esposo. Pero no dice el apóstol que sea pecado contra Dios. No es materia de fe, sino de opinión. “La naturaleza misma ¿no os enseña que al varón le es deshonroso dejarse crecer el cabello?”. La naturaleza es la que enseña que es vergonzoso que el hombre ande peludo como un hombre sin educación, o parecer un demente como Nabucodonosor. (Daniel 4:33) Pero en ningún modo es pecar contra Dios; más bien, es el resultado de andar alejado de  Dios.

(5) "Si alguno quiere ser CONTENCIOSO" (Litigioso, disputador, discutidor, rivalizar. Y por ende, envidiar, crear enemistad y división- (Larousse). Aquí está un punto muy importante que considerar: ¿Quién es el "contencioso"? Ciertamente no lo es Dios. El o los contenciosos estaban en Corinto, quienes causaban las divisiones condenadas por Dios. (1 Cor. 1:10) Quien contiende por el velo y divide el cuerpo de Cristo (la iglesia) está condenado por su propio juicio. (Tito 3:10, 11). Si a esto hace referencia el apóstol cuando dice "nosotros no tenemos tal costumbre", es clara conclusión que él no aprueba y sí repudia la posición de quienes disputan y levantan perturbación y división en la iglesia.

Por otra parte, si la frase, "Nosotros no tenemos tal costumbre" significa que ni "nosotros" ni "las iglesias de Dios" tenían la costumbre del velo en la mujer como señal de autoridad, entonces la inferencia indicaría que la "costumbre" (o problema) existía solo en Corinto, quedando excluidas todas las demás congregaciones.

En cuanto al "nosotros", nos preguntamos a quiénes hace alusión Pablo. Ciertamente están excluidas las iglesias ya mencionadas en el versículo 16. Con toda probabilidad, el "nosotros" hace referencia a Pablo, Timoteo, Lucas. Silas y otros que acompañaron a Pablo en su segundo viaje evangelístico. Puesto que ellos eran hombres y no usaban el velo, la frase, "No tenemos tal costumbre" equivale a "no tomamos la posición de que las mujeres debieran (o no debieran) usar el velo". Para quienes esto escribimos, este texto es una prueba más de que el uso del velo en señal de sujeción era sólo materia de costumbre y opinión de arbitraje humano.

EL VELO BÍBLICO.

Supongamos que estuviéramos equivocados en nuestras observaciones y conclusiones, y que 1 Corintios 11:2-16 conlleve la idea de que el velo sea un mandamiento para la mujer en nuestro tiempo. Aun habría que enfrentar serios problemas. En primer lugar, la palabra "velo" o "cubierta" es la traducción de la palabra griega "kalumma", sustantivo que a su vez proviene del verbo "kalupto" (y "katalupto") que se encuentran en 1 Corintios 11:4-7, 10 y significan "una cubierta, un velo", "cubrir, totalmente, esconder, ocultar, teniendo algo que cuelga de la cabeza". Si el usar velo es mandamiento, entonces tendría forzosamente que ser algo muy diferente al sombrero,- a un listón, pañoleta, cofia, chal o mantilla. Porque tiene que cubrir la cabeza completamente.

Encontramos en Éxodo 34:29-35 que, cuando Moisés bajó del Monte con las dos tablas de piedra, su cara brillaba. Por esta causa puso un velo sobre su cara para cubrirla, pues el pueblo estaba temeroso de él. Moisés no pudiera hacerlo usando los "velos" o "cubiertas" de nuestras modernas hermanas. No es bíblico decir que el tamaño del velo no importa. La palabra griega no admite conjeturas. La cubierta o velo en la Biblia era algo que ocultaba (tapaba) tanto el pelo como la cara. ¿Cuántas veces ha visto usted que los que abogan por el velo actualmente así lo manden? Nosotros nunca lo hemos visto, ni en iglesias proféticas, Testigos de Jehová, las mujeres católicas que antes usaban “una mantilla”. Las prendas que usan, un pañuelo a mantilla no las cubre.

ESPOSOS Y ESPOSAS.

En segundo lugar, el pasaje en cuestión habla de HOMBRES "orando o profetizando" y MUJERES "orando o profetizando", y acto seguido, entra al punto de la autoridad, quién gobierna (el marido) y quién debe de estar en sujeción (su mujer), enfatizando que la mujer debe de honrar a su cabeza, el hombre. Pablo escribe, "... el varón (griego, "aner") es la cabeza de la mujer (griego, "gune"). Es lógico que por inferencia necesaria comprendamos que estas palabras griegas "aner" (varón) y "gune" (mujer) signifiquen a la vez esposo y esposa, pues hablando de autoridad y sujeción el apóstol dice en Efesios 5:22,23 que, "Las casadas estén sujetas a sus propios maridos. . . porque el marido es CABEZA de la mujer". Este texto nos saca totalmente de dudas respecto a cuáles personas hace referencia 1 Corintios 11:2-16, esto es, a personas casadas que hacían lo mismo en la época de los dones espirituales: orar y profetizar. Es decir, que esposos y esposas oraban y profetizaban; de aquí la necesidad de aclarar el punto de quién es la cabeza y autoridad (el marido, varón) y quién debe de estarle sujeta (la esposa, mujer). Así pues, hermanos, por la explicación que el mismo apóstol Pablo da-en Efesios 5:22,23, y que es irrefutable, necesario es que aceptemos que el problema en Corinto era de esposos profetas y esposas profetizas, y que las instrucciones fueron para ellos y no para todos los hermanos. Y si dichas instrucciones no eran para toda la iglesia, ¿Cómo pudiéramos bíblicamente aplicarlas hoy día a las hermanas en la congregación?

Los partidarios del velo insisten que las hermanas vengan al culto de adoración con una pañoleta o algo parecido. Esto se debe a que  ignoran las Escrituras, y no saben que el profeta Isaías hace clara diferencia entre el velo bíblico y las demás prendas que las mujeres de Jerusalén usaban en su tiempo. (Isaías 3:18-23) Se mencionan "las redecillas" (v. 18), "las cofias" (v. 20), "los mantoncillos" (v. 22), "los velos" (v. 22), "las gasas" (v. 23) y "los tocados" (v. 23). El que diga que no importa qué clase de prenda use la mujer en los servicios, con tal que se ponga algo en la cabeza ("cabeza" no es solo el pelo) piensa "más de lo que está escrito" (1 Corintios 4:6), que es lo que el apóstol Pablo prohíbe a los corintios vanagloriosos. (1 Corintios 4:8, 18-19)

Si el mandato fuera usar velo, seria necesario aplicarlo de acuerdo a la Biblia; es decir, que tal prenda realmente "velara", cubriera, escondiera. Este es el significado explícito del verbo "velar": "cubrir con un velo". Ejemplo, el malvado Aman en Ester 6: 12, "... Aman se dio prisa para irse a su casa, apesadumbrado y CUBIERTA SU CABEZA", es decir, se puso un velo para que nadie viera su cara apesadumbrada. Y en Ester 7:8: “. . . Entonces dijo el rey, ¿Querrás también violar a la reina en mi propia casa? Al proferir el rey esta palabra, le CUBRIERON EL ROSTRO a Aman", es decir, le pusieron la capucha negra de tela que cubría la cabeza de los condenados a la horca.  

Cubrir la cabeza o el rostro son frases afines en la Biblia, significando ambas lo misma. Al Señor Jesús precisamente sus escarnecedores, cuando le condenaron a muerte, le cubrieron el rostro. (Marcos 14:65)  La palabra "cubrieron" es la traducción de la palabra griega "perikaluptein", PERI, "alrededor", y KALUPTO, "cubrir, ocultar, esconder". De aquí el infinitivo PERICALUPTO, cubrir totalmente.

Popularmente cubrir el rostro y cubrir la cabeza son dos cosas diferentes, porque cuando uno dice, "Me duele la cabeza" no significan "Me duele la cara”. Esta forma de pensar es logica en nuestra cultura occidental, pero, al tratar un asunto bíblico, debemos forzosamente ceñirnos a los términos, frases, expresiones e ideología de los pueblos orientales y sus costumbres, ya que de ellos trata la Biblia; y esta no hace diferencia alguna entre cubrir la cabeza y cubrir el rostro, y significan lo mismo.

Otras citas bíblicas: "Entonces se quitó ella los vestidos de su viudez, y se cubrió con un velo y se arrebozó... Y la vio Judá, y la tuvo por ramera, porque ella había cubierto su rostro. . . pues no sabía que era su nuera. . . Luego se levantó y se fue, y se quitó el velo de sobre sí y se vistió las ropas de su viudez". (Génesis 38:14,15, 16, y 19)

(1)   "Se cubrió con un velo y se arrebozo".    

 Es decir, se tapó totalmente la cabeza con el velo. No podemos decir que el velo le ocultaba solo el pelo; eso sería ir contra todo buen razonamiento. Se ARREBOZO ("Rebozar, envolver, cubrir", (Diccionario Larousse).

(2) "ella había cubierto su rostro. . . no sabía que era su nuera". Claro, porque el velo la cubría totalmente; la envolvía y era imposible que Judá u otro alguno la conociera.

(3) "y se quito el velo de sobre sí", porque ya no era necesario estar arrebozada, o envuelta con el velo. ("Arrebozar", poner rebozo, cubrirse, envolver el rostro con el rebozo).

(4) "Y él que había muerto salió, atadas las manos y los pies con vendas, y el rostro envuelto en un sudario". (Juan 11:44) ¿El rostro envuelto en un sudario? Y ¿Cómo se puede envolver el rostro con un sudario? Sólo poniendo el sudario envolviendo toda la cabeza, según la forma de sepultar entre los judíos (Juan 19:40).

(5) "y el sudario, que había estado sobre la cabeza de Jesús, no puesto con los lienzos, sino enrollado en un lugar aparte". (Juan 20:7) Tanto el sudario como el velo tenían por objeto cubrir totalmente la cabeza;

Si alguien dice: "Pues yo creo que cuando Moisés se puso un velo sobre su rostro (2 Corintios 3:13) no estaba incluido el pelo, pues nada más se menciona su rostro cubierto y no toda su cabeza". El "yo creo" o el "me parece que" nunca podrán contradecir la Escritura y sus ejemplos. Además eso sería ir contra la exégesis de la Biblia, pues los razonamientos humanos en ninguna manera podrán sustituir los ejemplos bíblicos.

Si Moisés se ponía un velo sobre su rostro, ¿Cuántas veces hemos visto que alguna mujer que aboga por el "velo" imite a Moisés? Nunca. Lo que usan es una pañoleta, un chal, a veces una toalla. Si fuera por “obediencia”, tendrían que ponerse el velo sobre la cara, siguiendo el ejemplo de Moisés.

Quienes ordenan que las hermanas asistan a los servicios con lo que ellos creen que es el velo, deben usar dicha prenda al tomar la Cena del Señor, cantar,  ofrendar, escuchar la predicación. ¿Por qué nada más al ORAR y cuando "profetizan"? Tales hermanas tendrían que usar el "velo" en cualquier parte y en cualquier ocasión en que se orara, para que no avergüencen al esposo. 
 Los árabes usan turbante unos, otros como los jordanos un paño cuadriculado sostenido por un aro. Los judíos mesiánicos conservando sus  distintas  costumbres para leer la Biblia; unos usan la kippah y en velo sobre los hombros; otros se cubren la cabeza y los hombros con un velo azul y blanco;   pero  ninguna tiene que ser imitadas por la  iglesia  de Cristo occidental